martes, 30 de noviembre de 2010

El factor de protección solar.


Nos bañaremos entonces. En el último ángulo del sol, en el perfil de cualquier día.

Quizás ya, al término de un verano.
Haré inventario de las horas que compactamos sobre la arena y los 100 ml de protección solar.
Me pedirás por última vez la toalla y volverás a secarte el pelo. Luego sonreirás.
Recogeremos nuestras cosas y nos iremos sin prisas. Volveré, entonces, la mirada atrás, preguntándome.
Dónde dejé mis otros veranos.

1 comentario:

  1. En algún lugar que no impidan que existan muchos más veranos. Tras el invierno, viene la primavera y aunque no lo quieras, otro verano.
    Chulo, me mola.

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